ALTER BRIDGE, HALESTORM, MAMMOTH WVH (MADRID, PALACIO VISTALEGRE)

Los viernes están hechos para poner un punto y aparte después de la semana. Lo que quizá muchos no se imaginan es que los viernes también están para hacer escala hasta Norteamérica a través del rock. El pasado viernes 18 tuvimos la suerte de volar en primera clase con tres bandas que hacen ese rock que no te permite dejar de moverte hasta el último acorde: Alter Bridge, Halestorm y Mammoth WVH.

No somos mucho de etiquetas, pero al arrancar la primera banda, Mammoth WVH, todos pensamos “mira, el hijo de Van Halen”. Pero el gran Wolfgang Van Halen ha sido capaz de hacerse un nombre propio con el sonido tan espectacular que ha logrado con su banda. Compuesta por Frank Sidoris a la guitarra, Ron Ficarro al bajo y Garrett Whitlock a la batería, calentaron motores con unos cuantos temas que a todos nos fascinaron.
La voz de Wolfgang junto al magnífico colchón musical que le regala su banda nos permitió disfrutar de temas como el que da nombre a la banda, “Mammoth”, y otros como “Mr.Ed” o “You´re To Blame”, uno de los temas más aclamados por el público presente.

Con el escenario aún caliente, era el turno de Halestorm. La banda pensilvana venía presentando su último trabajo de estudio, Back From The Dead. Con los primeros golpes de voz de la grandísima Lzzy Hale supimos que aún nos quedaba mucho rock para disfrutar durante toda la noche. La banda quiso tocar en directo varios de sus últimos temas, como “The Steeple”, que fue el segundo sencillo de su quinto álbum, “Wicked Ways” o la homónima “Back From The Dead”.
Todos los integrantes de la banda están muy bien compenetrados y se nota que la armonía fluye entre ellos. El batería, Arejay Hale, nos regaló varios solos que nos dejaron enamorados con su maestría. Sin olvidarse de temas anteriores, como “Love Bites (So Do I) o “I Am The Fire”, Halestorm logró hacerse un hueco entre los momentos inolvidables de la noche.

El tridente del rock tenía como últimos portadores a los estadounidenses Alter Bridge. Con su séptimo álbum de estudio recién publicado, Paws & Kings, se trajeron todo el rock bajo las cuerdas de sus guitarras para hacernos disfrutar con temas en directo como “Silver Tongue” o “Sin After Sin”. Los cuatro integrantes de la banda supieron meterse a un público ya desaforado en el bolsillo, e incluso fueron capaces de hacerles bailar algún lento como su maravillosa balada rock “Broken Wings”.
La dupla Kennedy-Tremonti supo cómo lucirse en temas como “Cry Of Achilles” o “Water Rising”. Pero las baterías de Scott Phillips y el bajo potente de Brian Marshall no se quedaron atrás a la hora de poner el acento en los momentos precisos de la noche.
El punto final del concierto vino de la mano de “Ghost of Days Gone By” y “Open Your Eyes”, dos temas en los que el público ya sacó sus últimos coletazos de rock para intentar devolver a la banda toda la energía que flotaba en el ambiente.

Los viernes también están hechos para el rock, y mucho más si este viene de la mano de tres bandas que supieron dejar huella propia bajo el Palacio Vistalegre.

María Sotelo